Vuelta al cole y vuelta a la rutina. La mayoría de los padres y madres han vuelto a la vida cotidiana en estos días: empieza el cole, las actividades extraescolares, como la música, el inglés, etc., los deportes, como el fútbol o la danza, y junto a ello los mensajes de: “hay que llevar al niñx”, “hay que recogerle”, “hay que hacer los deberes”, “hay que dar duchas”, “hay que hacer la cena”, “hay que hacer la comida para mañana” y sobre todo los pensamientos que se repiten de: “ya no puedo más”, “estoy muy cansadx” , “no tengo tiempo para mi mismx y mucho menos tengo tiempo para compartir con él/ella”. Todos esos mensajes, acaban por convertir en extraños a una pareja.
Los mitos son las ideas preconcebidas, que no se sustentan en ninguna base real, pero a pesar de eso se mantienen en el tiempo y que son comprendidas por un número importante de las personas como reales. Existen multitud de mitos que actúan todavía, en las parejas de hoy en día. Estos mitos hacen pensar que ciertas pautas se tienen que dar de manera obligatoria para que el amor sea en realidad, amor verdadero.
Me gustaría hablar en esta ocasión de los asistentes sexuales. Es un concepto relativamente nuevo en España, que poco a poco va tomando protagonismo dentro de nuestra sociedad y sobre todo gracias a las redes sociales y a plataformas que impulsan esta nueva realidad.
¿Qué significa ser un asistente sexual?
Prácticas sexuales hay infinidad, tantas como la imaginación nos deje. Si los dos amantes están de acuerdo en practicarlas, desde el respeto y la tolerancia, esas prácticas no tienen por qué ser cuestionadas por nadie. Cada pareja tiene el derecho a la sexualidad que desee y desarrollar un ars amandi propio.
Los momentos de intimidad con otra persona son muy importantes siempre, pero que cuando se hacen por primera vez, quizá son especiales. Eso, es lo que transmitiremos a los jóvenes, mediante educación sexual. Les explicaremos que estos encuentros pueden incluir numerosas prácticas placenteras y que todas ellas son igual de importantes, sobre todo si los dos amantes así lo consideran. El coito es una de ellas, pero no la más importante ni la única. No es la práctica imprescindible de cualquier encuentro erótico.
La educación sexual es el vehículo fundamental para que se propicie el desarrollo de personas con fuerte autoestima, seguras, tolerantes y con respeto hacia las demás.
La educación sexual fomenta el crecimiento personal y garantiza la consecución de los objetivos vinculados a las relaciones entre personas y en pareja.